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domingo, 30 de marzo de 2025

Mi bella Popayán

 


La vibración de los recuerdos nos coloca siempre frente a la temporada de la Semana Mayor, espacio para meditar un poco sobre el tema de Cristo en la cruz. En esta nueva temporada de Semana Mayor, cuando miles de personas nos visitan, hay que expresar, sin equivoco alguno, que Popayán, es la ciudad de todos los colombianos, seguidores de la fe católica donde se conmemora uno de los episodios más trascendentales de la religión. Aunque Dios detesta que se le adore mediante imágenes o símbolos, como la cruz.  Pues, a los israelitas, Dios les ordenó que no usaran “símbolo alguno” en su adoración. Por su parte, los cristianos recibieron el siguiente mandato: “Huyan de la idolatría”.

Pero, lo cierto es que, solo se puede amar, respetar, cuidar y proteger lo que se conoce. La ciudad por siempre amada, de plácidas colinas sobre un valle feliz, cumple 488 años. Su nombre armonioso sobre el que se canta y se viste de gloria junto al imponente volcán, bajo el cielo azul: Mi bella Popayán. Recordemos que hace 42 años caminábamos entre las ruinas, en medio de las murmuraciones refiriendo que, en la Cruz de Belén, hay una inscripción que dice que el día que esa cruz se cayera, Popayán se convertiría en polvo.  Por eso, vibramos de emoción patriótica, porque Popayán bajo experiencias pasadas y con el proceso de aprendizaje, renació como el Ave Fénix para abrir hoy sus puertas. Nada más propicio para buscar en la “Ciudad Blanca” una conexión significativa con algo más grande que uno mismo, generando emociones positivas, como la Paz.  

Es un deleite, evocar estas anécdotas, porque Popayán, es una ciudad de mitos y leyendas. Aquí hablamos de la ciudad porque todos somos ciudad. El ser humano da forma a la ciudad y la ciudad da forma al ser humano. Y es que, la ciudad es como una casa grande, y la casa una pequeña ciudad.

¡Semana Santa en Popayán!, Su nombre lo dice todo: religiosidad, historia, leyenda, arte, cultura, devoción de tradiciones, en una palabra, belleza. Popayán, ciudad legendaria, hecha para germinar en la fe de sus mayores, en sus ideales, en sus sentimientos y, en unos recuerdos de su hechizante paisaje que no debe perecer porque ellos surgieron para detenerse durante siglos ante su hermosura eterna.

Por estos días, las andas en los hombros varoniles rompen el incienso con el aroma inconfundible del espíritu entre los peregrinos. Las campanas, las matracas y los compases de las marchas, los sitiales, la campanilla, los templos y, el coro de las voces clamantes y litúrgicas. Las cruces, los silencios, los encajes…Las flores, las joyas y los himnos… Todo esto es una caravana interminable, que purifica su perfil de historia y alma. Y en el fondo del inigualable paisaje, la “Ciudad Blanca”, adormecida por el peso penitencial de tanta gloria con la presencia piadosa de un Calvario donde contrasta en su cielo azul, el imponente volcán del Puracé.

Aquí en Popayán, el drama del Calvario aparece vivo ante los ojos de los nazarenos, durante el recorrido de las cuatro noches en que se admira la grandeza insobornable y jamás caduca del cristianismo. Sembrar en el alma, en la conciencia, en el corazón, el amor a Popayán, es mantener y cultivar vivo el árbol de la libertad, es amar a Colombia, es infundir en el espíritu nobles sentimientos de nacionalidad.

Manifestemos la gratitud entre nosotros por las procesiones de Semana Santa que han sido la mejor fiesta religiosa y, para que, en este año, recobren el timbre y esplendor que alcanzaron en sus buenos tiempos, que tanta celebridad dieron por ello a la sociedad payanesa. Que siga siendo modelo de cultura de moralidad y de respeto por las cosas grandes y, divinas.

Civilidad: Popayán es una reliquia histórica de la patria y, como tal, se debe conocer a través de su historia para apreciarla, amarla y defenderla. |

 

sábado, 22 de marzo de 2025

La ola imparable que crece cada día mas

 


Es vivificante escribir sobre hechos evocativos de mi ciudad. Mi pasatiempo ha sido relatar los momentos durante el caminar de los días. Escribo, porque no se deben perder en el tiempo, ni guardar en el alma, las cosas que fueron. Hay que conservar la memoria colectiva para las generaciones futuras. Me deleito sacándolas del baúl de los recuerdos y, en ese trasegar, procuro agradar a quienes me leen. Evoco el saludo “patojo”“¿cuándo llegaste y cuando te vas’”. Meditaciones que, nos transporta, siendo saludable y buena para el espíritu. No es nostalgia por el pasado, es la vida retrocedida en el corazón. Lo nuevo causa perturbaciones, porque los reformadores del mundo olvidan cuán difícil es retocar con acierto un cuadro antiguo.

La palabra contemporánea es aplicable a la forma permanente que estamos viviendo y la que les tocará a nuestros descendientes. Pero, esta ola es imparable, haciendo la vida más corta, dados los cambios tan significativos que la postmodernidad trae consigo. Ya no extrañamos el afectuoso abrazo del amigo ausente, ni saber de su salud, porque frecuentemente “chateamos” en msn (messenger). Por internet conocemos los resultados de laboratorio clínico. Ahora es posible comprar productos y servicios en línea desde cualquier lugar con una conexión a internet. Se ha revolucionado la forma en que las personas aprenden. Ahora es posible acceder a cursos en línea, tutoriales, videos educativos, etc. Y, también ha permitido a las personas trabajar desde cualquier lugar con una conexión a internet.

Todo trato es por Facebook, con cadenas de “amigos” virtuales que a través de fw, forward (re-envíos) recibimos toda clase mensajes.  Gajes de la tecnología que nos atropella. El impacto del internet en la vida diaria ha sido enorme en las últimas décadas, siendo difícil imaginar la vida sin acceso a internet, ya que cambió la forma en que las personas trabajan, estudian, se comunican y entretienen. Desde luego su adopción, rebasa los límites del humanismo, y nos conduce a la deshumanización. De allí que, sea necesaria la capacidad de discernimiento para distinguir la información útil, de la que no lo es, dentro de esa “carreta de la información”, conocida como “internet”

¡Que sería de la vida sin el celular!  Precisamente por eso, ya poco vemos la cara de los “patojos”. Extrañamos las voces de amigas que lloraban sobre nuestros hombros al oír cuitas de sus vidas. Extrañamos también, la caminata semanal para entregar los escritos, y, de paso, saludar a toda la familia periodística del periódico, ahora denominado: “El Nuevo Liberal”. Las redes sociales desplazaron el acto emocional de la presencia. Es el impacto del Internet en la vida diaria. La tecnología, cambió las cosas en esta época de muchos conocidos, pero de pocos amigos. Han pasado un poco más de 30 años desde que se masificó el internet. Hoy en día, es difícil imaginar la vida sin acceso a internet, por haber cambiado la forma de vivir.

¿Qué se hicieron los tertuliaderos? ¿Qué de los helados de Baudilia y qué del tinto en el Café Alcázar? Y los “Grilles”: la Carreta, La Llave, el Fantasio, la Tranca, el Maryland, el Playboy o simplemente “comer prójimo” en el parque de Caldas, son cosas de ayer. Añoro las salas de cine: teatros Bolívar, Popayán, Valencia, Anarcos, y Palacé, no solo para ver películas, sino como sitio de encuentro para intercambiar las pequeñas novelas y los “cuentos” de Tarzán, el Llanero Solitario, el Fantasma, Porky, la Pequeña Lulú. ¿Dónde están los viejos amigos?

Civilidad:  Ahora, los encuentros casuales son en las largas filas reclamando medicamentos, en la nueva EPS, en las IPS, en las droguerías, en laboratorios clínicos y, lo más triste, en las salas de velación.

23/03/2025


domingo, 16 de marzo de 2025

Explicaciones sobre la palabra escrita

 


El día del Periodista, en Colombia, es una celebración que cuenta con diferentes fechas de conmemoración. Así tenemos que, el 9 de febrero se lleva a cabo, aunque no coincida con el día Internacional de periodista, ni tampoco con la festividad de otros países. Pero, además, existe otra celebración menos sonada, determinada como el “Dia del Periodista y Comunicador”, fijada el 4 de agosto, mediante la Ley 1016 en memoria a la publicación que hizo Antonio Nariño sobre los Derechos del Hombre en 1794.

Si bien no es necesario tener título de grado para ejercer como periodista, lo ideal es cursar una carrera ligada a la comunicación como periodismo, comunicación o medios digitales. 

En cuanto a los vocablos periodista y columnista, estos son dos oficios o profesiones muy parecidas, por lo que se prestan para ser confundidas. Pues, mucha gente le llama periodista al columnista y viceversa; pero en el fondo no lo son.  Los periodistas son personas capacitadas en sintetizar, jerarquizar y publicar una información recolectada con responsabilidad y sin salirse de lo que representa la noticia. Por lo general, son egresados de una facultad de comunicación social. En cambio, los columnistas son personas, en la mayoría de los casos, con un conocimiento elevado, que colaboran en los medios de comunicación con diferentes enfoques y diferentes profesiones, expresando una opinión de un tema en particular; además, generadores de debate y opinión.

 

Y, se llama escritor a quien se dedica a escribir. Al que tiene muchas razones para plasmar ideas en combinación de autoexpresión y registro de hechos, historia o resultados de investigación. Desde luego, con destreza lingüística, perseverancia y el aprendizaje como una constante a la hora de afrontar la inspiración.  La mayoría de escritores escriben íngrimamente solos. Por lo general, están involucrados en una actividad solitaria que les obliga a luchar tanto con los conceptos que están tratando de expresar como con la mejor manera de enunciarlos. Esto puede significar elegir el mejor género o géneros, así como elegir las mejores palabras. Los escritores a menudo desarrollan soluciones idiosincrásicas de algo o alguien, buscando encontrar las palabras adecuadas para poner en una página en blanco. En fin, el escritor influye en las ideas y la sociedad, por lo que hay muchos casos en los que el trabajo o la opinión de un escritor no son bien recibidos y a veces controvertidos. El gran incentivo para un escritor, es que lo lean.

En este artículo o columna, he tratado de relatar las cosas buenas y las cosas malas de ser escritor. He pensado y creído, que igual a los lectores les gustaría saber por qué hacemos lo que hacemos. Redactar y escribir es un trabajo como cualquiera otro. Indicando que saber escribir, necesariamente no implica convertirse en escritor. Los escritores tienen como oficio, ocupación o profesión el desarrollo de escribir, muchas veces libros inéditos. Ciertamente, se reconoce como escritor a aquel que produce obras literarias por placer en su tiempo libre. Y claro, quien escribe debe tener aptitudes, conocimientos técnicos y teóricos para la creación de obras con determinadas cualidades.  Un escritor debe estar en condiciones de combinar las palabras, utilizar los signos de puntuación y obtener otros recursos literarios de manera que sus textos sean considerados de calidad por su estética o por otro motivo.

Civilidad:  Escribir es un trabajo maravilloso. Así que, leer y escribir es otra forma de vivir pasando largas horas al día frente a un teclado.

 

 

 

sábado, 8 de marzo de 2025

Nos fregamos con Jota

 


No hay duda, tenemos muchas dificultades para la convivencia ciudadana por falta de Urbanidad. Simples detalles, como sacar las basuras a destiempo, tirar desperdicios a la calle; no respetar las señales de tránsito, bloquear las vías, el ensordecedor ruido de motocicletas, permisividad para que los niños irrespeten a los padres y a los mayores, no ceder las sillas a ancianos ni a mujeres embarazadas, a manera de unos pocos y malos ejemplos. Todo ello podrá estar reglado en el Código de Policía, pero la mayoría y los más frecuentes, no constituyen falta ni delito punible. En fin, la ausencia de civismo, el comportamiento incívico, la mala educación, los malos modales y la grosería, producen dolor social.

Antes enseñaban a "respetar a los mayores en edad, dignidad y gobierno". Ahora ni lo enseñan ni lo practican, porque le dan lectura de autoritarismo.  Estamos caminando tiempos difíciles. Dirán que, es pura cantaleta buscar rescatar la Urbanidad y el Civismo. No es cantaleta frente a lo que estamos viviendo y oyendo a diario: ofensas y calumnias entre unos y otros; valdría la pena que algunos congresistas y altas personalidades repasaran las normas. Pues, allí se repiten bochornosos espectáculos, hasta maltrato y faltas de respeto a las mujeres. Mal ejemplo para otras corporaciones: asambleas y concejos. No envían mensajes de paz a la sociedad ni cumplen los objetivos de promover la prosperidad y la vigencia de un orden justo.

La mala educación empobrece la sociedad. Si no es así, por qué la “moda” de la vulgaridad, defectos éticos e indecentes son generadores de tanta violencia multicausal ¿Nos acostumbramos a la violencia que se generalizó y se dispersó?

La Urbanidad y los buenos modales, no tienen edad, se aprenden con nuestro prójimo más cercano, en el núcleo fundamental de la sociedad: la familia -hombre mujer-. La mala educación en la infancia y adolescencia termina asentuándose en la edad adulta

En las familias donde no hay valores, no hay respeto. Donde abunda la mentira, se crea un ambiente toxico y caótico que afecta negativamente a todos sus miembros y a la sociedad. A partir de ahí, aumentan las cacareadas palabras de depravación social, corrupción con todas las molestias que ocasionan las malas conductas. Si el prójimo se comportara con la debida Urbanidad, la vida sería mejor. Todos sabemos y comprendemos las molestias que ocasionamos con nuestro pésimo comportamiento; pero, nada hacemos por corregirlo. La Urbanidad y, el respeto hacia los demás, están en cuidados intensivos.

En viejos tiempos, escupir en la calle era motivo de reprensión social. Porque había autoritarismo en la familia, reflejado en la sociedad que evitaba el comportamiento insolente de los niños hacia los padres y mayores, reprendiéndolos con severidad para evitar las molestias consiguientes al prójimo. El exceso de democracia (libertinaje) y, la falta de autoridad es palpable; se manifiesta como la triste y abrumadora carencia de Urbanidad.   

¿Por qué un ciudadano suizo posee, mucha más urbanidad que un español, o que un colombiano? ¿Hay alguna forma de aumentar el respeto mutuo sin aplicar el principio de autoridad?  Definitivamente no, ni a corto ni a mediano plazo. Ignoro cómo los antiguos vikingos evolucionaron a los civilizados nórdicos. Con seguridad no fue en un corto período. El mundo es complejo y, está lleno de incertidumbres

Devolvámosle la autoridad que se les arrebató a ciertos agentes sociales: maestros, profesores, padres de familia, jueces, autoridades de gobierno, pues nunca se les debió despojar de su papel corrector de conductas infantiles anti urbanas. Ahora, impera el exceso de absolutismo al emplear funcionarios como guardia personal de agentes del gobierno y el congreso, en lugar de invertir en el antiguo papel de educar y vigilar la ciudad. Devolver la autoridad perdida, no es urgente es: vital. Una cosa es autoridad y otra, autoritarismo. Se trata, entonces, de construir un marco de convivencia respetuoso para que la familia funcione con el orden y la armonía necesarios.

Civilidad: El hogar, la escuela y los recintos sagrados de la democracia, nunca deben parecerse a la calle.

 

 

sábado, 1 de marzo de 2025

Inversión en salud para el Cauca

 


Utilizo la frase: “hasta las banderas”, acuñada por los reporteros taurinos cuando informaban que la plaza de toros estaba llena hasta el tope. Así mismo el “Centro de Convenciones Casa de la Moneda”, estuvo repleto de asistentes, el viernes 31 del mes próximo pasado. El aforo de personas cómodamente sentadas es de 800. Pero, ese día, con la presencia de gerentes, empleados de las Empresas Sociales del Estado e invitados, invadieron hasta los pasillos, más de 1.200 personas. Por primera vez en la historia, se realizó, el Foro sobre inversión en salud para el Cauca. Allí hubo exhibición (stands) de servicios, mesas de trabajo, muestras, alimentos etc. En este importante recinto payanés, brillaron con luz propia, el gobernador Jorge Octavio Guzmán G. y su secretaria de salud Carolina Camargo Restrepo, reafirmando su compromiso por una atención más digna y eficiente. 

La Dra. Carolina Camargo, en conferencia magistral demostró que sabe, conoce y ama lo que está haciendo por el Cauca. Considero su conferencia como magistral, pues el calificativo se le concede a una expresión, luego de ser expuesta en público. Yo no habría podido hacer esta opinión, sin haberla visto y escuchado los comentarios de los presentes después de su disertación. Por lo tanto, considero válido el calificativo. La conferencia fue un evento en que la Dra. Carolina con destreza, de frente y con excelente vocalización durante 60 minutos informó e inspiró a los participantes a continuar con el fortalecimiento del sistema de salud pública en el departamento del Cauca. Se apreciaba suma complacencia; medida por la atención de los asistentes, al escuchar los proyectos y realizaciones que cubren las expectativas de laxos años.

La satisfacción se medía en el aplausómetro por la ejecución de adecuaciones menores financiadas por Min-Salud por valor de $ 18.981´507.681 y gobernación del Cauca en $ 2.000´000.000, para las 41 Unidades de Atención en Salud con obras y valores concretos.  

Dando larga a su conocimiento, la expositora continuó anunciando, sobre dotaciones en ambulancias equipos de rayos X, biomédicos y mobiliario hospitalario: Min-Salud por $ 340’.000.000 y gobernación del Cauca $ 294´274.674

Inversiones nuevas en infraestructura hospitalaria, Min-Salud $143.076´840.469 y, Gobernación $ 51.283´460.305. Además, otras iniciativas nuevas por valor de $ 5.073´018.750.

Estas gratas noticias que benefician a nuestra comunidad, tienen una inversión total de $ 221.049´101.879, avaladas con la presencia del arquitecto de Min-Salud, David Hernández Pinto, quien desglosó las cifras que arrojan una cobertura del 80% al sistema de salud pública del Cauca.

Finalmente, la Dra. Carolina, exhortó a las ESEs para continuar en conjunción con instituciones estatales que rigen el proceso de inversión pública en el Cauca. Utilizando metodologías, normas y procedimientos que orientan la formulación, ejecución y evaluación de iniciativas, que son claves para potenciar el impacto económico y social de la inversión pública en procura de mejorar la calidad y eficiencia del gasto público. 

Enhorabuena, este engranaje gubernamental en beneficio de la inversión pública, emergido de dos pilares fundamentales (Min Salud-Gobernación del Cauca) para impulsar el desarrollo y el crecimiento sostenible del departamento, aún en momentos de dificultad. Los esfuerzos para invertir en el desarrollo público, son punta de lanza para la reactivación económica del Cauca y la mejora en los servicios de salud, porque, la falta de infraestructura limita la atención.

Civilidad: Inversiones en salud, aspectos inimaginables años atrás, que aumenta la calidad de vida de los pacientes y del personal hospitalario. Gracias a esto, pueden realizar su trabajo mejor aún. 

 

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