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domingo, 31 de diciembre de 2023

Lengua patoja

 


En Popayán el bilingüismo patojo se reconoce fácilmente porque es del nativo-hablante, que maneja dos lenguas al mismo tiempo. Se trata de un bilingüe bicultural que integra ambas culturas, principalmente el nivel afectivo.

Me parece que es grato compartir estos recuerdos con mis lectores. Empiezo con las frases de cajón: ¿Cuándo llegaste? ¿Cuándo te vas? ¡Dizque tenés un puestazo! Cómo será el sueldazo. Y qué tal estas: Achichuy, cuando no se tiene calentador de agua. Y la incomprensible: ¡A cosa bruta!  Y esta, aquí no se muere de infarto, sino de repente.

He recogido las anécdotas del bilingüismo payanés, que innegablemente son especiales. Son apuntes del Popayán que se nos fue y claro, también de mis recuerdos de infancia, por lo que, sólo es entendible para los de mi generación, traídos del lenguaje de nuestros padres y abuelos. “Se fue de bruces y se peló la cumbamba”. “Vení te espulgo que se te han enroscao esos crespos”. “indio mugí, bájate que te aporriás”. “Carajo, hasta cuando fregás”. “Tomate el ricino o te meto un lava ‘o”. “No seas tan perecudo”.

Este ejercicio de recordar viejos modismos es herencia de nuestros ancestros. De allí "el endenantes y el antualito” a decir en el Popayán antiguo. Para completar el repertorio en forma de diccionario de la real academia patoja, cito aquí, según un orden determinado algunas expresiones de la lengua payanesa, acompañadas de su definición, equivalencia o explicación, así:

Ate-untico: Se dice comúnmente para solicitar a un amigo que lo espere un momento. Ejemplo: "ateuntico me voy a cepillar y bajo"

Aguanta: Que algo Vale la pena, Sinónimo de 'pega'. Ejemplo: aguanta parce

A-mi-semi-hace: Expresión usada para decir que algo o alguien tiene determinada

A vender: expresión común para llamar a la señora de la tienda.  “Vecina: a vendeeeeer (tocando con una moneda en la reja)

Aliños: Comida.  “vamos a pegarle a los aliños si o que.”

Borondo: Vuelta. “vamos a darnos una de borondo.”

Cascar: Darle duro a alguien. “A ese chino le metieron una cascada”

Chancuco: Papelito doblado hábilmente en letra muy pequeña, guardado bajo la manga con las respuestas de un examen.

Chimba: Expresión usada para manifestar la conformidad o inconformidad de un objeto

Chimbo: Adjetivo de una cosa o individuo que desdice mucho de las características esperadas.

Chirimía: Agrupación musical, alma del folklore caucano. Acostumbra tener un diablillo entre sus miembros sembrando zozobra entre la comunidad general.

Chinín: Expresión usada entre patojos principalmente durante el saludo ¿“Tosqué chinín? ¿Cómo te vaila?"

Chorro: Dícese del trago, el licor O el aguardiente. “Poné plata pal chorro”

Chupá: Expresión común para alegrarse con las desgracias de otra persona. Reemplaza la expresión: "bien hecho". “Chupá por pendejo”

Churretiar: Acción que describe el comportamiento anormal de algo o alguien. Salieron con nada, se churretiaron, paila". O para significar una diarrea, “Se churretió”

Chuspa: Bolsa. "vecinita: ¿me da una chuspa e´ leche?"

Cuetón: Artefacto pirotécnico. Especialmente en fiestas decembrinas.

Culillo: Expresión usada cuando alguien se acobarda o le da miedo.  "Móntese!, o le da culillo"

Descambiar: Acción de cambiar un billete de alta denominación por menuda o sencillo.

Eloé: Apócope de velo ve. "Eloé, comiendo sólo ¿no?"

Engranar: del verbo engranar. “Amanecí engranao”

Enredar: Parcharse a una vieja o un man sin compromiso.

Gurre: Persona poco agraciada físicamente.

Hembrinchi: forma cariñosa de llamar a una mujer. "Que hembrinchis hay pa' hoy"

Lana: Plata, dinero. "Cuanta lana tenés pa' la rumba"

Nospi: Verse con alguien. “Nospi-llamos "

Pata: Patada. “Seguís jodiendo y te enciendo a pata”

 

Civilidad: El listado de vulgarismos que aparecen a cada rato en nuestro hablar cotidiano, es interminable.

domingo, 24 de diciembre de 2023

NIño rico, niño pobre

 


Juanito era un niño ávido, criado en medio de la opulencia; la largueza económica de sus padres le permitía tener todo lo que se antojara. Era un niño consentido; lo que pedía, se lo concedían. Juanito estaba en plena formación en el mejor colegio, sin entender que el éxito escolar comenzaba con la lectura.  Por ello, no comprendía los principios y valores morales. No aplicaba el conjunto de normas espirituales, sociales y personales en las que se mueve la sociedad y, en la que cada persona decide regirse, para distinguir entre lo “bueno” y lo “malo”. Los principios y valores morales no se reflejaban en su modo habitual de obrar y proceder. Además de repelente con sus compañeritos, no tenía en su imaginario, la necesidad de ser bueno ni de ayudar a la gente que lo rodeaba. Por eso, en cada Navidad, Juanito armaba berrinche, entraba en colera, pues siempre, pedía más y más, volviéndose insaciable en sus exigencias. Lo caracterizaba su codicioso proceder, su interés propio, su egoísmo que nunca conseguía satisfacer. Era como el agua salada, cuanto más la bebía, más sed le daba.

Al llegar la Navidad del 2023, época de crisis en el mundo, poco le importó a Juanito porque como no leía no se enteraba ni interesaba por lo que sucedía, dedicándose a acumular cosas sin ningún sentido, aunque no supiera disfrutar de ellas. Su ambición era pedir y pedir, a sus padres, incluso a sus familiares cercanos y lejanos para que lo invadieran de regalos. Sus padres, le insinuaban que ya tenía muchos juguetes, que desarrollara el gusto por el estudio y el aprendizaje para proporcionarse una vida mucho más interesante y llena de oportunidades. Aun así, Juanito dedicaba demasiado tiempo a los videojuegos presentando mundos y situaciones irreales, en la percepción de la realidad con la que había perdido contacto, malgastando su tiempo sin aprender nada nuevo. En todas las formas le explicaban que, si le daban muchos regalos este año, otros niños del mundo se quedarían sin juguetes. Pero su cabecita necia, les respondía: “a mí no me importa, quiero los juegos más modernos”.   

Así que sus padres quisieron darle una lección a su inquietante adicción. Fueron tantos regalos, pero, tantos, que no tuvo tiempo para abrirlos ni disfrutarlos. Se deschavetó y rabió el día de la Navidad, pues no supo qué hacer con la cantidad de regalos.

Sus padres, lo llevaron donde un niño pobre que gozaba solamente con dos regalitos que había recibido, disfrutando como nunca con su familia y, sus amiguitos, cantando villancicos. Este niño había aprendido a valorar el esfuerzo de sus padres y entendía la crisis que afectaba a familias desposeídas de la fortuna.  Ante semejante lección, Juanito sollozando, experimentó la auténtica alegría.  Asimiló  que era más importante regocijarse con la familia y los amiguitos, que tener muchos regalos en Navidad. Así Juanito empezó a donar entre los niños pobres, todos los juguetes que nunca pudo disfrutar en su cantidad acumulada.

Este cuento didáctico de Navidad, para rescatar los valores por encima de la fiesta materialista en la sociedad actual. Enseñanza bonita y necesaria para los niños del mundo; para cambiar la empatía por la antipatía.  Para ponerse en la piel de otros ayudando a los demás. Enseñando a ser generosos antes que avariciosos.

Moraleja: Generalmente, los niños ignoran, qué es, el espíritu navideño ¡Navidad es mucho más que regalos! Socializar principios y valores, uno de ellos: el espíritu navideño evitando la codicia.

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jueves, 21 de diciembre de 2023

 



Otra Navidad

Otro año

Más sin tí

Imposible olvidar

en mis brazos

te pude tener

Y hoy

En la eternidad

Con tus ojos

Solo

me puedes mirar

 

Rio Blanco, 21 de diciembre 2023

 

sábado, 16 de diciembre de 2023

Este escrito, “no es un adiós, sino un gracias”

 


En el trajinar de la vida pública suelen decir que no hay mayor honor que ser alcalde o gobernador de la ciudad o del departamento donde se ha nacido. De allí esta reflexión, que siendo obvia no deja de ser importante. Estas letras, cuando faltan 15 días para terminar el cuatrienio, en gratitud hacia los dos mandatarios que a partir del 1° de enero de 2024 dejarán de ser, el uno alcalde de Popayán y, el otro gobernador del Cauca. En ese contexto, dedico mis frases de agradecimiento y reconocimiento por haber desempeñado sus cargos en función de nosotros los ciudadanos. Es que, agradecer habla bien del corazón y hace que el corazón se pronuncie.

¡Ya no es tiempo ni de balances ni de reproches!  Es el momento de demostrar gratitud pública, pues en silencio no vale. Bien dice el refrán: "Es de bien nacido ser agradecido". La gratitud es una de las mayores cualidades que una persona puede tener y, ese valor afectivo hay que demostrarlo en apoyo, solidaridad y respeto.  En la misma forma que los elegimos, hay que despedirlos con palabras de gratitud.

Reconozcamos que, tanto al alcalde, Juan Carlos López Castrillón como al gobernador, Elías Larrahondo Carabalí, les correspondió administrar en tiempos muy difíciles. El 2020 fue un año de incertidumbre, tiempos de pandemia, tiempos de muerte, de dolor, de necesarias restricciones. Pero, muchas gracias, porque lograron superar las múltiples crisis, apoyando a los ciudadanos y a las poblaciones vulnerables. En su período de gobierno, enfrentaron varias crisis: la pandemia, la deuda, el cambio climático y los conflictos, que pusieron en peligro su capacidad para proporcionar bienes y prestar servicios públicos esenciales. No faltaron las limitaciones fiscales, los desastres naturales relacionados con el clima, la alarmante inseguridad ciudadana y el conflicto armado. Aun así, hubo legitimidad en sus gobiernos para actuar con eficacia. Esta breve recopilación conceptual para explicar el marco sobre antecedentes sociales, políticos y económicos del país sin afectar la gobernanza multinivel -local y regional-. Entonces, es de justicia valorar su gestión positivamente, porque la responsabilidad del alcalde y, del gobernador con sus equipos, no fue sólo para planificar el futuro, ejecutar proyectos, prestar mejores servicios públicos posibles, sino atender en definitiva las necesidades y demandas de los gobernados. Los mandatarios afrontaron problemas inesperados con la repentina COVID-19 que azotó al mundo, sumado al estallido social o revuelta popular, vislumbrando una serie de elementos que, fueron sin duda, el trago amargo, que también las familias, las empresas privadas y administraciones públicas debimos soportar.  Sin ignorar que Colombia tiene un alto nivel de informalidad en la economía, falta de redes de seguridad social para más de la mitad de la población y la presencia constante de violencia de grupos ilegales. Con semejante telón de fondo, aumentaron las tensiones sociales, los juegos de culpas y los enfrentamientos entre el gobierno nacional y gobiernos locales y regionales haciendo parte de las noticias diarias. En ese trasegar, ¡gobernar no fue fácil ni grato!

Podría extenderme en un sinnúmero de razones para manifestar mis agradecimientos hacia el Dr. Juan Carlos López Castrillón ,@jclopezcastri y para el Dr. Elías Larrahondo, @LarrahondoElias Por eso, ahora cuando terminan su mandato, en acto desinteresado, les manifiesto mi inmensa gratitud. Y, en mi derecho de expresarla, les digo: Gracias, muchas gracias Dr. Juan Carlos López. Mil y mil gracias, Dr. Elías Larrahondo por su vocación de servicio. Que la suerte y el éxito vayan siempre con ustedes. 

Civilidad: La gratitud es una manifestación positiva, madre de todas las virtudes.


sábado, 9 de diciembre de 2023

¡Llegó diciembre!

 


Y arrancó la Navidad. A través de los tiempos la Navidad ha cambiado mucho.  En estas fechas son habituales los comentarios proferidos por algunas personas sobre esta celebración religiosa y familiar, afirmando que: “La Navidad no es lo que era”  

Por ello, en este escrito trato de ofrecer un repaso, sobre todo para aquellas almas sobrevivientes del siglo pasado. Se trata de una simple perturbación en el largo río del tiempo de 50 años o más, revelando una doble realidad. La Navidad a través del tiempo, ha sido una celebración llena de alegría para niños y nostálgica para muchos adultos. Es una festividad cada vez, menos determinada por las ideas religiosas y más estimulada por el consumismo, provocando la pérdida del espíritu navideño. La tradición dice que un mágico viajaba hace miles de años, cumpliendo los deseos de las personas que visitaba cada año, regalándoles paz, luz y energía positiva. La Navidad, es la celebración religiosa donde se festeja el nacimiento de Jesús con el mensaje de esperanza, unión, paz, amor y fraternidad entre familia, reuniéndose para compartir sus tradiciones.

En el siglo pasado, el anuncio de la Navidad, se hacía a través de las chirimías que recorrían las calles de Popayán. El diablo vestido de rojo con cachos, perrero y talega en que recogía las monedas, era la distracción de los niños. A mediados de noviembre las dos emisoras existentes rompían la monotonía del año con anuncios y Villancicos anunciando el mes de la alegría. Era pues, una época sin televisión, sin radio, sin redes sociales, sin celulares en oferta y sin carritos a control remoto. Imagínese amable lector, una Navidad sin centros comerciales con indigestión vehicular en el parqueo. Imagínese a la gente caminando por las calles empedradas en una noche de luna para ir a la Misa de Gallo

Supóngase los nacimientos en cada hogar de hace 50, 60, 70 años, en que los querubines de papel se amontonaban en las nubes de celofán; el pastor con la oveja al hombro subiendo por una ladera tiesa de tanto aserrín y engrudo; las ovejas de madera y algodón comiendo musgo dada su inmovilidad. Lamentablemente, es una tradición que prácticamente se ha ido perdiendo.

Durante los últimos años, pocas celebraciones han evolucionado tanto como la Navidad, incorporando otras de distintos orígenes. En 1967, nació el Alumbrado Navideño en Medellín; de allí en adelante, “los alumbrados” de parques y avenidas, de origen paisa, se convirtieron en la columna vertebral del lindo decorado navideño en las ciudades.

La tradición cambió con la llegada del árbol con adornos en época decembrina como costumbre ancestral de romanos paganos. En cuanto al árbol navideño, hay diferentes versiones acerca del origen del pino que adornamos con bolas, moños, estrellas, guirnaldas y luces. Comercialmente el árbol de Navidad lo actualizan cada año con toda la ornamentación necesaria creando árboles de diferentes alturas, estilos y precios. En Colombia el árbol comenzó a ser popularizado a mediados del siglo XX. Sobre el árbol de navidad que no puede faltar en las casas de casi todo el mundo, es un símbolo alrededor del planeta tierra para celebrar esta época del año. Ya sea natural o artificial, ya es un clásico para adornar las casas, oficinas y tiendas. Además, se asocia con la llegada de Papá Noel o Santa Claus, quien deja regalos debajo del árbol, los cuales simbolizan los dones que Dios dio durante el año. Sea cual sea la versión original, es un hecho que la Iglesia se encargó de modificar esta práctica convirtiéndola en un culto religioso en honor del nacimiento del niño Jesús; incluso, la significación religiosa del árbol afirma que éste es una representación del Paraíso, lugar donde vivieron Adán y Eva, los primeros seres humanos en poblar la tierra según el cristianismo y catolicismo.

Civilidad: Que la Navidad, como fecha bendita, mantenga unido a todo el mundo.

domingo, 3 de diciembre de 2023

Voces y expresiones célebres

 

A través de la historia, son muchas las frases célebres escritas por personajes conocidos y, otras no tanto; pero todas aportan sabiduría a sus palabras sin pasar de moda. Al contrario, por su excepcional contenido se transmiten de boca en boca. Por lo general, se convierten en frases filosóficas brindando conocimiento muy valioso en cortas palabras.   A todos nos gusta leer esas expresiones creadas no sólo por genios, sabios y autores.  Son un conjunto de palabras por las que el ser humano transmite sus pensamientos, emociones, sentimientos e ideas. Estas se manifiestan, por lo general, con toda libertad y en forma espontánea. Los proverbios y las frases célebres, famosas, cortas y bonitas, son las mejores para compartir, ya sean de amor, de la vida o de amistad de educación, de motivación, de superación… Algunas tienen diferentes orígenes, creadas por el mero uso actual del habla, es decir, inventadas por los hablantes como parte del uso diario de nuestro idioma, que aquí retomo y explico.  

“La patente de corso original”, era un permiso extendido, usualmente por los monarcas de Inglaterra, a capitanes de navíos piratas para que atacaran y robaran galeones. En vez de piratas, estos marinos pasaban a ser corsarios, y en caso de ser hechos prisioneros, se les debía tratar como marinos de la Marina Real, perdonando sus vidas, y no podían ser ejecutados sumariamente sin juicio como piratas. Hace pocos días, el expresidente Santos, uso la frase: “tener patente de corso” queriendo significar que alguien tuvo permiso de una autoridad para cometer ilícitos con impunidad.

En el bajo mundo, pasar por el tubo es una expresión, diríamos grotesca o vulgar, que se refiere a la muerte de una persona por el uso de un arma de fuego. Así oímos decir: “A esa gonorrea la pasaron por el tubo” (refiriéndose a que lo mataron). Pues, el uso de la palabra gonorrea, en Colombia es usada ampliamente como insulto; debido a que tal vocabulario es propio de una persona criada en un ambiente de difícil desarrollo cultural y educativo.

Un colombianismo muy utilizado es: “no dar papaya” con varios significados, entre otros: no te expongas/ no seas descuidado/ no des la oportunidad para que suceda algo malo/ no te pongas en una situación en la que pueden aprovecharse de ti.

Y otros más, como: "Colgar las botas, los tenis o los guayos”: Esta expresión nace en el mundo del deporte, específicamente es una frase relacionada con el fútbol. Pues, es habitual que al terminar el partido los jugadores, al quitarse los guayos o zapatillas, las unan atando los cordones para echárselas al hombro o colgarlas en la pared. La frase 'Colgar las botas', también se utiliza cuando un futbolista deja su profesión y, de forma más extensa, cuando una persona se jubila o deja su trabajo o muere para siempre. Asimismo, es muy habitual usar la expresión “Cortarse la coleta”, nacida en el mundo de las corridas de toros y, que posee el mismo significado.

Colombia en todos sus rincones se caracteriza por ser un país de regiones, con todas las características propias, muy especiales, ricas y variadas en su cultura. Algo que evidenciamos, en diario vivir, con su música, sus comidas, sus preparaciones y, sus creencias. Por falta de espacio, dejo en la imaginación de mis lectores, estas expresiones: “te falta mundo”; “Se las da de señora”, “con todos los juguetes”, “sacar la mano”, “picar el ojo”, “no soy monedita de oro”. “ni rajan, ni prestan el hacha”, “harina de otro costal” ...

Civilidad: Hay que valorar la diversidad cultural que existe en nuestro país, las cuales se reflejan en estas voces.

 

 

 

 

domingo, 26 de noviembre de 2023

ZIGZAGUEANDO POR DOQUIER

 


Zig zag proviene del alemán zick-zack, que significa serpenteo y que en sus derivados conforman el verbo "zigzaguear" para entender que es ir de un lado a otro mientras se avanza. Ese término indica el comportamiento dinámico o móvil en forma de “Z”

Así es el rayo que se representa con un zigzag irregular, con largos movimientos hacia abajo y hacia atrás. Igual, las tijeras dentadas están diseñadas para cortar tela o papel con un borde en zigzag, para disminuir el desgaste. En la costura las modistas, usan la puntada en zigzag que una puntada de la máquina de coser en forma de zigzag, les sirve básicamente para sobrehilar una pieza. Se usa también, como patrón básico decorativo en cerámica. Los adictos al vicio el Zigzag igualmente, es una marca de papel para forjar cigarros; famosa en todo el mundo por quienes les gustan liar a mano sus propios cigarrillos de tabaco o marihuana entre otras plantas.

El zig-zag marcado con pintura amarilla prohíbe el estacionamiento en determinadas zonas. Y la marca amarilla longitudinal continua: si está ubicada en un bordillo o junto al borde de la calzada significa que la parada y estacionamiento están prohibidos, o existe algún tipo de restricción temporal.

En cuanto a las técnicas de la lectura, es bien conocida en “zig-zag”, que consiste en deslizar los dedos de la mano, a una velocidad mayor de la que habitualmente leemos, por debajo de la línea de escritura y que al llegar al final de ella se retrocede rápidamente hacia la siguiente y se continúa de la misma manera que al inicio.

Recordemos la sabiduría popular que apuntaba hacia los burros al tratar de explicar la mejor manera de subir un monte. Aun los ingenieros dicen que para trazar una carretera en la montaña basta con hacerlas en zigzag, en forma natural como lo hacen esas bestias de carga (y muchos otros animales, como el hombre), porque así el esfuerzo es menor. De allí, el dicho montañero que condensa la misma enseñanza: “la línea recta no es siempre el camino más corto entre dos puntos”

En Colombia, la política anda zigzag. De tiempo atrás instalaron este método de política, que por lo general NO se lleva a cabo en “línea recta” sino en zigzag. Y que no es otra cosa que la doble militancia, el transfuguismo político: Hoy están aquí, mañana allá. Bien dice Gustavo Bolívar, cuando afirma:

 

"Es que aquí no hay partidos. Si existieran había deliberaciones y la confrontación sería con argumentos. Aquí existe la corporatocracia, esos partidos obedecen a los intereses de las corporaciones y por eso no quieren dar la discusión. Si existieran partidos, tendrían argumentación y en vez de retirarse de las plenarias darían las peleas con argumentos. No los hay. Quien más se acerca a lo que es un partido es el Centro Democrático porque tiene unas tesis y las defiende. Para mí son más respetables ellos que esos partidos que están como veletas cambiando de posición de acuerdo con los intereses"

En Popayán, el "zigzagueo" es una pirueta peligrosa que arriesga la vida de peatones, ciclistas y motociclistas., cuando el conductor en un vehículo de dos ruedas pretende adelantar a otro cualquiera dentro de la amada ciudad. Todo el mundo anda zigzagueando en política y entre automotores de cuatro ruedas, zigzagueando por doquier  cualquier otro vehículo oo político, por la izquierda, por el centro y por la derecha sin respetar las distancias mínimas, arriesgando hasta el pellejo.

Civilidad: En Colombia zigzagueamos prometiendo amor y paz, pero nos la pasamos confrontando y defenestrando.

 

sábado, 18 de noviembre de 2023

 



Cada vez la vida nos proporciona pruebas contundentes de que Dios existe.  En el transcurrir de la existencia, aprendemos a cultivar la fe en Dios.  Es que, solo Él nos permite utilizar nuestra “capacidad intelectual” para ver, sentir y presenciar las evidencias que apoyan la existencia de un Ser Supremo.  Las tres razones para creer en Dios y encontrar las pruebas convincentes de que Él existe, se adoptan en múltiples formas, satisfaciendo muchas preguntas mediante: pruebas tangibles, el testimonio de testigos y la confirmación espiritual.

Las flores florecen maravillosamente, pero sus pétalos se van cayendo diariamente.  Así mismo, la vida como la niebla de la mañana, permanece un poco, pero prontamente, se desvanecen. Entonces, igual que la flor, la nieve, la vida terminará un día. Los milagros de la vida en la tierra, ocurren siempre y son reales, incluso en la florecita más diminuta que está compuesta de una manera sorprendente. La misma existencia de seres humanos, animales y plantas, viviendo en la complejidad y estructura del planeta tierra y todo el universo, nos prueba que hay un Creador.

En la semana que hoy termina, me sorprendió un ejemplo de vida que pude conocer, encontrando la inspiración para escribir en mis propias memorias, narrando lo que sigue:

Estando sentado yo, en el butaco del lustrabotas en la sala de recibo de mi amada Popayán, un hombre de apariencia joven, de contextura alta y robusta, se fue aproximando con trastorno en la marcha apoyado en un bastón. Se sentó a mi lado, suplicando una limosna. Erraba desde la costa norte implorando la caridad publica me contó, brindándome un dulce. Entablando el diálogo me dijo:

Soy feliz con mi madre, con quien ando el camino de la vida. Me la describió como una mujer con “corazón de madre”; ella ha refinado su función de madre en grado superlativo”, lo cual es totalmente cierto. Cada niña y cada mujer buena siempre se prepara para su misión divina y eterna de la maternidad,

Y continuó añadiendo: en los veintiocho años de mi existencia he padecido varias operaciones quirúrgicas debido a un cáncer cerebral. En el hospital volé tres meses. En estado de coma me parecía estar en un sueño muy largo y extraño. En la inmensidad del espacio, vi una luz radiante, cosas espirituales, como una conversación con Dios. Volaba viendo a mi madre acariciándome sumida en llanto, rogando que volviera en sí (recobrar el sentido el que lo había perdido) Yo llevaba año y medio en estado vegetativo y en estado de mínima conciencia, no tenía apertura ocular, ni respuesta verbal en ningún momento. ¡Me habían declarado la muerte cerebral, no había posibilidad de recuperación!

Prolongó su conversación contándome, que un día escuchó un sonido, al cabo de un tiempo, sonido que tenía relación con el estímulo del entorno. Creo que la razón por la que estoy aquí, es porque muchas personas oraban por mí; todo el mundo en las redes sociales, mis amigos y familiares.  Pero, en especial, las oraciones de mi madre a Dios que con absoluta fe pedía, rogaba, imploraba por mi vida. Entonces, llegó el día prodigioso, del signo de Lázaro.  - Que es un fenómeno que acontece cuando, tras determinar su muerte, el paciente vuelve a recuperar algunos signos vitales como la frecuencia cardiaca, el automatismo respiratorio o la circulación sanguínea- ¡Volví a la vida!, resaltó. Pronuncié la maravillosa palabra: “mamá”. De inmediato llamó al médico, insistiéndole ¡me habló doctor, me habló!

-        ¡Increíble!, afirmó el médico a mi venerable madre  - Y abrazados, sumergidos en llanto: expresaron: “¡Dios existe, Dios te bendiga en tu vida!”

Civilidad: Durante tu vida en la tierra, es el momento de tomar una decisión: tener fe en Dios.

sábado, 11 de noviembre de 2023

Mi ciudad nativa

 


Desde mi advenimiento al mundo hasta hoy, he vivido siempre en Popayán.  Algo he viajado, pero nunca he tenido la posibilidad de residir en otra parte, y aunque la hubiese tenido, no lo habría hecho, porque aquí mis padres asentaron la brújula. Aquí aprendí con esa venda de enamoramiento y con la plenitud vital absoluta durante mi niñez, mi primera juventud y ahora en mi adultez.  A estas alturas de mis años, cada vez aumenta el deleite por mi amada ciudad. De allí que, el establecimiento de mi domicilio siempre será aquí, en esta ciudad amable, decente y, provinciana, como lo fue con sus ranchos pajizos; en forma más o menos ordenada; creciendo con mesura y conservando las dimensiones de una ciudad intermedia.  Así lo debieron presagiar sin ser arúspices del urbanismo y la demografía para que no tuviera millones de habitantes.   Mi venerada ciudad, con el transcurrir de los años, ha mostrado a propios y foráneos su dignidad y decoro como virtudes comunes de sus gentes, junto a su arquitectura que le imprimen un encanto casi fascinante. Como dije arriba, poco he viajado, pero sigo leyendo que en ninguna otra urbe del planeta se experimenta tanto sosiego, como en Popayán, pues todavía tenemos sus habitantes, el gratificante privilegio de llegar a casa con vida al final de la tarde. Esta bella ciudad, no nada estruendosa, más bien inofensiva, considerada como la culta capital de Colombia.

Así que, sus gobernantes, no pueden dejar que la culta Popayán pierda este título de antaño y que, sea envilecida, convertida en un infierno de maleantes y gamberros.  Ni que los señores choferes de buses y taxis sean destronados por la beligerancia; sino al contrario, que posean apariencia de cultura, de aspecto inteligente y con aptitudes para la escucha y habilidad para conducir.   

Popayán no puede competir con las grandes urbes colombianas: Cali, Bogotá, Medellín, Barranquilla en cuanto a sus avenidas. Pero, si puede ufanarse con relativa modestia de poseer una arquitectura hermosa, con una impecable armonía en su construcción.  

La preocupación a nivel local por resolver problemas de congestión del tránsito se debe orientar hacia medidas que restrinjan el uso del vehículo particular y la implantación de políticas de estímulo al uso de transporte público y otros modos alternativos inscritos dentro de la movilidad sostenible, tales como los desplazamientos cortos e intermedios, preferiblemente a pie.

En el caso del centro histórico de Popayán, por su carácter de corazón de la ciudad, aislado de su contexto inmediato, requiere intervenciones que conserven, revitalicen y mejoren sus condiciones, para lograr el disfrute de los atractivos culturales y recreativos que se pueden ofrecer al turista. Por consiguiente, el nuevo alcalde Juan Carlos Muñoz Bravo, encargado de planificar, ejecutar, ordenar y fiscalizar el tránsito podría incorporar en sus proyectos, la evaluación de la viabilidad de la peatonalización del centro histórico de Popayán.

Entre las molestias de los habitantes de la ciudad y desde luego las mías, están en que el centro histórico, se ha visto perjudicado al perder calidad urbana por la invasión de vehículos de transporte de carga, transporte privado, público de pasajeros y motocicletas, así como el mal estacionamiento de estos vehículos; también, por la concentración del comercio informal en las adyacencias del sector, entre otras razones. Sin embargo, habría sido difícil peatonalizar, si antes no se hubiese demolido para erguir ahora, en su lugar, una obra que se ajuste al entorno arquitectónico de Popayán a cambio de esa horrenda guarida de vampiros eufemísticamente denominado: “Centro comercial Anarkos”.

En mi obcecado pensamiento, la ciudad no puede ser descastada hasta los extremos más delirantes. Antes de que eso ocurra por cuenta de quienes tienen un concepto historiográfico diferente, la amada ciudad debe peatonalizarse, reubicando y conservando dentro de su entorno, todas las estatuas. En el derribamiento de estatuas de personajes de la colonia y la conquista, es evidente que están los jóvenes y las comunidades indígenas que quieren reescribir la historia. De allí que, el gobierno municipal debe estar atento, a través del Ministerio de Cultura, antes de que sea tarde. Lo prudente sería bajar las estatuas y meterlas dentro del marco histórico de Popayán. El día que en actos vandálicos derriben las estatuas, las techumbres, las casonas y los templos, Popayán será un pueblucho más de Colombia. 

Civilidad: Si terminaran con la historia de Popayán ¿a que vendrían los turistas?

 

domingo, 5 de noviembre de 2023

 





En tu cumpleaños

Domingo a domingo
Converso contigo
visito tus cenizas
¡olvidarte jamás!
 
Dejando de llorar
acepté tu ausencia
paletadas de tierra
encima mis flores
 
Suspiro por verte
Un beso al cielo
al tiempo eterno
¡Oh! inmenso vacío!
 
Eres parte del cielo
Donde estas
Envías tu fuerza
para seguir en pie
 
Mis latidos lentos son
Tú te llevaste la mitad
Vivo de tus recuerdos
Mi bondadoso ángel
 
Esta ocasión lo merece
desde este paisaje azul
amándote festejo tu día    
¡Cumples un año más!
 
HDG.  
Rio Blanco 05-11-2023

La vieja y la nueva política

 

Con la costumbre dominical de hace 25 años, y con el título de este escrito, me dispongo, en esta ocasión, acercarme al tema de actualidad, procurando abordarlo con una perspectiva histórica. A mis lectores viejos y jóvenes, les narro contraponiendo la forma en que se hacía la vieja política y la nueva, emergente, entre la “pericia” y la “inexperiencia”, en que convirtieron el debate político, de enantes y el muy presente de la campaña electoral.

Hace varios años, el proceso eleccionario era una fiesta democrática, llena de alegría y colorido. No tomo nada prestado de lo aquí narrado, porque lo viví. Inundados de curiosidad o por entusiasmo los electores acudían a las manifestaciones para escuchar discursos de verdaderos oradores; claro, sin faltar los tamales y el aguardiente, pero se oían disertaciones atrayentes, con las mismas quejas desesperadas que aún manan. Solo había dos partidos con ideología propia: el liberal, corriente filosófica, política y económica que promovía la libertad del ser humano, la igualdad política y jurídica y la búsqueda del progreso material de los pueblos y, el partido conservador que favorecía el uso del poder político o la fuerza del Estado para conservar o restaurar tradiciones, creencias o costumbres, de tipo religiosas, culturales o políticas. El afán, que también es antiguo, de no llamarse “partido” y de usar nombres sin referencia ideológica está muy extendido en nuestros días. Nos acercamos a 40 “partidos” que gritan sin conciencia y con interés político - simplismos radicales o reaccionarios-. Gritan convirtiendo la política en un sicofantismo, en obra de denostación y de insulto. Critican y zahieren a los mandatarios en general buscando buena acogida.

En otros tiempos, digno de atención, es el hecho de que, para sufragar, al votante le bastaba depositar una papeleta de color azul (conservador) o rojo (liberales) tiempos pasados, cuando la política quedaba en manos de quienes tenían medios de fortuna, para dedicarse a vivir de la política. En esta época en que se hacen ricos con la política, lo novedoso hoy: avales, coavales, coaliciones, alianzas de grupos políticos, confundiendo al votante para marcar cinco tarjetones con la pluralidad de candidatos cuestionados, de allí la cantidad de errores o sin marcar.

En el pasado, el estilo popularizado, las calles, con algo que tiene que ver con los resultados: caravanas de vehículos particulares y servicio público acarreando electores, adornados de colorines y, alebrestados por conjuntos musicales y chirimías; además de consignas cuyo propósito, era dibujar los contornos ideológicos de su formación política, que en rápido recorrido difundían en la ciudad.  

Hoy, vivimos tiempos en que está muy viva, y no sin motivo, la habitual crítica a la corrupción existente en la vida política.  Tampoco es, desde luego, nuevo en la política el enfoque simplificador de problemas complejos, ni el confundir la necesaria crítica con la acusación o la descalificación sistemática, y hasta la calumnia o la difamación

En tiempos idos, la casa conservadora y el directorio liberal, repletos de simpatizantes desbordantes de alegría, equipos de sonido con música altisonante, serpentinas, comilona y trago hasta clarear el día. Tales manifestaciones con sentimiento patriótico y delirio político vinieron a mi memoria, a diferencia del pasado 29 de octubre, frio y, gris.

Quienes tenemos una memoria personal de tiempos anteriores a esta temporada de transición o cambios, recordamos con nostalgia estos hechos extremos.  Bendita naturaleza humana que nos permite emocionarnos: llorar de alegría o de tristeza y, que nos eriza el vello al oír la música, los hechos positivos; que se nos salten las lágrimas cuando no llega el abrazo que tanto esperábamos, que la mente y el corazón necesitan.

Por falta de espacio, dejo allí, exclamando:  Ahora a perdonar de corazón a quienes se instalaron desde sus trincheras “antiloquesea” para ofender y calumniar. Y desde luego, para felicitar con todas las de la ley al triunfador en franca lid, al gobernador electo, Jorge Octavio Guzmán Gutiérrez, quien se impuso en contundente victoria.

Civilidad: Que Dios todopoderoso aumente la sabiduría al nuevo gobernante en su predisposición de trabajar unidos por el desarrollo, progreso y bienestar del Cauca.

 

 

 

domingo, 29 de octubre de 2023

Curiosidades electorales de ayer y de hoy

 


Para deliberar sobre las características del voto como instrumento de la democracia, digamos que, durante el siglo XIX y gran parte del XX, Colombia no tuvo sufragio universal. Los esclavos, analfabetas y gente de escasos recursos no podían ejercer el derecho al voto. Quienes sí podían votar eran los hombres mayores de edad, a los 21 años, casados y con propiedades a su nombre. En 1853 no hubo grandes cambios. Los hombres casados y mayores de edad votaban de manera directa y secreta para escoger presidente, vicepresidente, magistrados de la Corte Suprema de Justicia, procurador, gobernadores, senadores y representantes. Sin embargo, el sistema electoral seguía siendo poco flexible y condicionante. 

Así que, el representante del partido conservador, Mariano Ospina Rodríguez, fue el primer presidente de la República de Colombia electo por voto directo y secreto, ejerciendo su mandato entre 1857 y 1861, permitiendo que la hegemonía conservadora se apoderara del poder. No obstante, en 1863, se llevó a cabo una nueva reforma constitucional donde se estableció que cada estado federal tendría derecho a instaurar sus propias reglas electorales. Esta constitución exigió que los votantes hombres debían saber leer y escribir. Además de implementar un tope de ingresos anuales mayor a $500 o en su defecto poseer propiedades cuyo valor superara los $1.500. De esta manera eligieron a sus sucesores: Bartolomé Calvo y Tomás Cipriano de Mosquera.

En 1910 volvió a establecerse la elección directa de presidente de la República y en 1936, el sufragio universal se implantó para todos los hombres. Fue entonces, solo hasta 1954 que se otorgaron por primera vez los derechos electorales a toda la población, sin discriminación y, con el plebiscito de 1957, por primera vez, las mujeres ejercieron su derecho al voto. Hay que recordar que lo interesante de este momento en Colombia, es que en unos departamentos las mujeres fueron las que más votaron, haciendo histórico el momento por el rol que jugó la mujer en dichas elecciones.

Los componentes clave de la abstención en Colombia siempre han sido:  la falta de confianza en las instituciones, corrupción o fraude electoral, falta de representación política, ausencia de beneficios, falta de veeduría -control- 

Con el pasar de los años, la confianza que tienen frente a la Organización Electoral, frente al proceso electoral y la percepción sobre la transparencia en el conteo de votos, los colombianos siguen teniendo una confianza parcial, no se confía en la Organización Electoral. Aunque, la Registraduría ha mejorado, aún hoy, todavía presenta como punto álgido de la votación, el escrutinio de mesas, luego escrutinio municipal y finalmente departamental, lo que implica la intervención de muchas personas y la realización de muchos procedimientos que, si bien se han ido mejorando, deben ser susceptibles de nuevas implementaciones tecnológicas para garantizar aún más la transparencia del proceso.

Llegó el día de la cita electoral, y como ciudadanos debemos hacer una evaluación objetiva y desapasionada de las propuestas de quienes se postularon. Hay que seleccionar muy bien, porque son más los politiqueros que los políticos, y porque son las barrabasadas que dicen que los programas de gobierno de los candidatos.  Así que, la información, propuestas y programas de gobierno, deben resistir la evaluación frente a las normas vigentes, para oxigenar y enmendar la democracia, para superar la violencia y reconstruir el tejido social con el propósito de hacer posible una convivencia sana.

Hoy sin duda, con responsabilidad debemos elegir bien para votar y botar sin dejarse engañar, sin insultos electoreros, desdeñando la politiquería y los politiqueros.  Enfrentemos sin vacilaciones los vicios de la política que avasallan en gran medida las decisiones y acciones de gobierno en bien de todos.  No dejemos entretejer ni entronizar la corrupción. Llegó el momento de darle la oportunidad a la honestidad, a las ideas, liberándonos de las ataduras de aquellos que han convertido nuestro sistema político en un negocio como aquellos que tienen el hábito de llenar sus bolsillos con dineros de la reposición de votos ¡Con votos responsables elijamos bien!

Civilidad: Ciudadanos, el futuro de Colombia y de la democracia está en sus manos. Hoy 29 de octubre, con responsabilidad, su deber es elegir para votar y votar para elegir bien.