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domingo, 9 de enero de 2022

El Carnaval de Negros y Blancos

 



Recordando los días felices y los buenos tiempos del ayer; el 5 y 6 de enero eran festivos con grandes acontecimientos. Lo recuerdo por la majestuosidad de sus carrozas. Además, por el encanto y el respeto al momento de poner la pintica de betún y los polvos (talco) con que se jugaba. Rastreando los inicios del  “Carnaval de Negros y Blancos” estos surgieron de las tradiciones nativas andinas, africanas e hispánicas. Recordemos que, no obstante, el proceso de evangelización que vivieron los indígenas ante la llegada de los colonos europeos durante el siglo XVI produjo que estas celebraciones fueran primero censuradas y que luego cambiaran de connotación. El origen de los Carnavales, se remonta a la época indígena, ya que durante el siglo XVI los indígenas de la región celebraban las cosechas con danzas, música y rituales. 

En un principio reconocieron el juego de negros el día 5 de enero. Se celebraba porque durante la época de la colonia, los negros pidieron un día libre de esclavitud, habiendo sido concedido por la corona española. Entonces, tiene su origen en un día de libertad de los esclavos negros. Desde entonces, cada 5 de enero, los negros danzaban por las calles, tocando su música. Y, como una forma de apropiarse de su libertad, pintaban las casas de los blancos de negro.  

El origen del día de “blanquitos” es incierto, pero es sabido que los mestizos quisieron emular a los negros al verlos gozar con sus danzas rituales con máscaras y cánticos africanos en esa fecha especial. Fue así como para compensar a los mestizos, mucho después, les concedieron el día siguiente, para hacer el juego de blancos, donde los mestizos espolvoreaban a los transeúntes de polvos blancos perfumados. El testimonio oral cuenta que, quisieron buscar la unidad de las comunidades para festejar en un solo día, los negritos y blanquitos, pero ello nunca se pudo conciliar.

Es por esto, por lo que, la fecha oficial del origen del Carnaval se remonta a finales del siglo XVIII, con el “Juego de Negritos”, cuyo foco cultural se situó en la ciudad de Popayán, habiéndose extendido a Pasto entre las décadas de 1880 y 1890. Y, que fue en 1912 cuando surgió el juego de Blancos, que se empezó a desarrollar el 6 de enero.

Lastimosamente mi bien amada ciudad dejó que el juego de Carnavales que se jugaba el 5 y 6 de enero en Popayán, los pastusos se los tomaran como suyos en las calles de su ciudad para coronar a una reina y bailar al son de mascaradas y comparsas, presentando un documental en el año 2004, con imágenes fílmicas de los Carnavales Estudiantiles de Bogotá de 1928, dándolos a conocer como si inicio del festejo sureño se hubiese originado en Pasto. Hoy, por hoy, el Carnaval de Negros y Blancos es una de las fiestas más importantes del Sur de Colombia. De ahí que haya sido declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2009. 

Pero que quede muy claro, el origen fue un "asueto" a negros, originado en el Gran Cauca, comarca a la que pertenecía Pasto. Es bueno recordar que en 1607 hubo una rebelión de esclavos en la población de Remedios, Antioquia, causando miedo entre las autoridades coloniales. Pues, siendo más numerosa la población negra de Popayán que exigía un día de descanso en el cual, ellos pudieran ser libres, aunque fuera un solo día. Entonces, para atenuar esa rebelión de los negros y para conservar la paz social, la Corona Española concedió el día 5 de enero.

Soy un baúl de recuerdos. Y para que conozcan un poco, de quien esto escribe, orgullosamente nació en el Pabellón Primo Pardo, en el siglo pasado, un día de negritos, mientras la familia Castañeda hacia su entrada por el Callejón (Barrio Bolívar) Patojo de nacimiento que con orgullo y con amor por mi terruño llevo en el corazón. ¡Que vivan los negritos!

Civilidad: La administración López Castrillón con buen juicio, prudencia y madurez aplazó las festividades porque, ¡primero la salud y la vida antes que la diversión y el jolgorio!

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