En esta ocasión narro la historia de un pastuso que se radicó
en Popayán, porque en esta capital encontró las oportunidades que buscaba. Conozco
dos hijos de policías, de esos antiguos policías: uno caucano, el médico Julio
Cesar Klinger y otro pastuso: Jairo Revelo. De aquellos policías que rondaban
las esquinas. De los policías que eran respetables y respetados.
El protagonista de este escrito, es hijo de ese policía con
vocación de servicio que cumplía con el deber encomendado, con ética en su
profesión porque hacían respetar la ley. Del policía del barrio tan querido,
amable, conocedor de las gentes, que el uniforme se lucía como fuente de respeto,
tanto como la investidura del juez y la sotana del cura del pueblo.
La preparación académica, la formación y
estudios básicos del ingeniero civil Jairo Revelo,transcurrieron en Popayán,
por esos avatares de la vida. Con orgullo cuenta que debido a que su padre
policia fue traslado de esa airosa y apacible ciudad que se extiende al pie del
volcán Galeras, resignada a las amenazas eruptivas, llegó a esta ciudad de
Popayán que le ha dado todo.
El ingeniero Revelo tiene la
convicción de que “lo mejor de la carretera Pasto- Popayán es la venida a esta
ciudad”; eso sí, sin apartarse de su departamento y la región, pues ha
contribuido con el desarrollo de sus coterráneos de manera permanente.
Jairo Revelo, es egresado de la
Universidad del Cauca, su experiencia profesional es fructífera. Como
empresario constructor, creó su propia empresa familiar a través de la cual genera
empleos directos e indirectos para un buen número de familias en Popayán. Es de
alguna manera, cuando se genera empleo con la idea de construir tejido social
que se dignifica al ser humano, al mismo tiempo que se contribuye con el
desarrollo económico de Popayán. Desde su óptica social y humana, tiene claro que
la rentabilidad que puede generar un trabajo no debe quedarse solo en los
bolsillos del propietario, ya que los empleados merecen compartir el éxito
económico, pues ellos contribuyen de manera directa a la generación del mismo y
los logros de su empresa.
Emprendedor atento, amable y simpático,
así es Jairo Revelo, pastuso que llegó a esta bella Villa para imponerse en el
complejo mundo de la construcción sobre el cual tiene amplio conocimiento,
participando desde luego, positivamente en el desarrollo de Popayán. Por ello,
el ingeniero Revelo, es un referente importante no solo dentro de la colonia
pastusa que es grande y querida, sino para los mismos raizales que se quejan de
que las oportunidades de trabajo son escasas.
Como corolario de este escrito, la
verdad es que Popayán se siente favorecida con la colonia pastusa y estos,
están contentos con su suerte en Popayán. En consecuencia, y desde mi punto de
vista, en esta ciudad de puertas abiertas, si se puede construir sociedad,
tejido social y, estructuras económicas.
Civilidad: En Popayán,
se puede construir ciudad, generando empleo formal con amplio sentido de
responsabilidad.
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